15 de abril de 2009

Lo propio y lo ajeno

Lo que más me cuesta es lo que menos vale. Si me demoro es señal de que no estoy en esas cosas y menos aún lo estoy si me entretengo con cualquier excusa. Suelo empezar sin plan; el primer trazo acarrea el segundo.

Esto viene a ser una adaptación de las palabras de Montaigne referidas a las cartas. Pero las buenas palabras, las que tienen que decirse, se quedan a vivir con nosotros y nos acompañan cuando las necesitamos, si es que recordamos cómo convocarlas.

La suerte de no saber qué decir es que hay otros que sí lo han sabido y podemos recurrir a ellos cuando el pensamiento se vuelve perezoso. No hay motivo para que se ofendan; al contrario, es un halago que piensen en uno como el apoyo necesario. Por eso, en un momento como éste, es preferible acordarse de quien te hace bien con tanta facilidad:




Entonces deviene un nuevo despertar. La mañana se aclara como si pasaran las nubes, pues la pared de la izquierda tiene otra pared que, como los erizos de Cernuda, sintió frío y quiso compartirlo y que las alegrías y las penas del amor no desaparezcan para ser recuerdo de un olvido. Y como no hay sombra sin la proyección del sol, nuestro bosque de palomas disecadas debe ser mojado por la música de la mañana. En Buenos Aires hay cuatro espejos donde juegan tu boca y los ecos, hay gatos en las camas tibias, hay ratones en el horizonte, hay sombras cruzando los puentes, hay lascivias bajo los puentes, hay desorden de miradas desordenadas y un te quiero susurrado entre dientes.

7 comentarios:

Pardilla dijo...

El hueso de la aceituna no se me ha atragantado

Óscar Martín Hoy dijo...

Así que al final encontraste mi blog, qué puntería. ¿Tanto se notará cómo escribo? ¿O es que siempre recurro a los mismos temas?

Anónimo dijo...

Te delató la lista de música

Anónimo dijo...

Claro, pero por el programa, no por los temas en sí, muy distintos de la ilsta de Caosmos.

Anónimo dijo...

Claro, pensé que si allí había lista, tú tendrías que tener otra. La temática de tus entradas y Cortázar en tu perfil, fue lo que me decantó a este blog (que tengo que explorar con calma, el hueso, ya sabes)

Anónimo dijo...

A ver si vuelvo a coincidir contigo en el chat que tengo problemas con la lista de canciones y tú se ve que lo controlas bastante bastante

Por cierto, yo también sigo desde mi blog "las afinidades", somos unos cuantos

Óscar Martín Hoy dijo...

Ya hemos coincidido, pero si ves que sigues teniendo problemas con la lista avísame y me empeñaré en que salga como tiene que salir.

Así que tú también sigues las afinidades electivas, mira qué bueno. Yo la descubrí por un amigo que aparece allí, de vez en cuando lees algo que está bien, pero no siempre no es fácil que encuentre poemas de mi gusto.